miércoles, 19 de octubre de 2011

Octubre en Munich

Los días se hacen más cortos, la luz no brilla con la misma intensidad, los árboles dejan de rebosar verdor...
Hace frío, es invierno, el cálido carácter veraniego que me animaba a pasar cada minuto diurno tendida al abrasante sol se esfuma siendo sustituido por un cierto recelo hacía esta nueva estación que durante unos minutos me causa una ligera tristeza.
Mis horas de deambular por las calles se ven claramente reducidas pero como al fin de cuentas me encuentro en una ciudad maravillosa no me queda más que intentar disfrutarlas. Disfrutar ese frío intenso sobre mi rostro al cruzar el portal de mi apartamento que despierta al instante todos mis sentidos, del vaho que desprenden mis palabras en cada bocana de aire...
La gente acelera el paso, parece que todos huimos en invierno, huimos en busca de un resguardo momentáneo para poder proseguir hacia nuestro destino que bajo estas temperaturas se hace eterno.
Mi devoción por el verano se hace patente en estas lineas pero he de decir que el invierno tiene "algo especial" y "romántico" que hace que le de una pequeña oportunidad de ser tímidamente disfrutado.

1 comentario:

  1. Huir? Invierno? Mmmmm... No me queda más remedio que cumplir el acuerdo:

    http://cartasquenuncarecibiste.blogspot.com/2011/11/historias-que13.html

    Besos frios

    ResponderEliminar