Hacía mucho que no escribía nada, la inspiración se había diluido sin apenas avisar pero supongo que en estas fechas (todo el mundo lo resalta) hasta una mente carente de creatividad se aviva para poder decir algo...
No soy un amante de estas fechas, no me malinterpretes no soy una antisistema en plan "Odio la Navidad" porque no la odio, simplemente me da igual.
Pienso que esa ilusión que albergábamos cuando éramos niños, esa magia que envolvía estos días con falsas pero bellas creencias se han esfumado por completo llevándose con ellas las ganas de seguir celebrando estas fechas bombo y platillo.
Mi familia (entendida como mis padres y hermano) no es una entidad muy familiar (entendida como tíos, primos etc) por lo que nuestras cenas comidas y demás eventos navideños tan sólo constan de 4 miembros (os aseguro que mas que suficiente) lo que aminora la magnitud de estas fiestas reduciendolo a un día cualquiera...
Además el intercambio de regalos que en la infancia creaba tal revuelo ahora se reduce a un intercambio de objetos ya esperados (fui con ellos a comprarlos) convirtiéndolo de nuevo en un día cualquiera.
De verdad que no tengo intención de parecer una persona gris arruinanavidades pero a pesar de la efusividad y felicidad que muestra la gente durante estos días, las calles inundadas de lucecitas y las tiendas repletas de gente a cualquier hora, la navidad sigue sin decirme absolutamente nada y quizás es una lástima que ya no muestre esa ilusión que me caracterizaba cuando era una cría pero llegados a este punto es difícil creer en estas celebraciones como algo bonito y especial.
Con esto no me queda más que deciros...
FELIZ NAVIDAD!!!